Un diálogo inventado
La versión más difundida de los supuestos avistamientos se atribuye al Apollo 11, y es la transcripción mostrada a continuación. Según los partidarios de su autenticidad, en una frase que se repite sin variar una coma en decenas de artículos y páginas web crédulas, "Otto Binder, ex empleado de la NASA, dijo que esta conversación entre Houston y el Apollo 11 fue escuchada casualmente por unos radioaficionados que pueden captar un 'canal reservado' para estos mensajes":
Houston: What was it, what the hell was it? That's all I want to know....Una versión similar traducida al español fue publicada por el ufólogo y novelista J. J. Benítez, en su libro "Ovnis: SOS a la humanidad. La insólita experiencia de un periodista español en Perú" (1975):
Apollo 11: These. . . (garbled) . . .babies were huge, sir, they were enormous....
No, No, that's just field distortion....
Oh, God, you wouldn't believe it....
What...what...what the hell's going on? Whatsa matter with you guys . . . ?
They're here, under the surface....
What's there.. .malfunction. . .Mission Control calling Apollo 11....
Roger, we're here, all three of us, but we've found some visitors....
Yeah, they've been here for quite a while judging by the installations....
Mission control, repeat last message....
I'm telling you, there are other spacecraft out there. They're lined up in ranks on the far side of the crater edge....
Repeat, repeat....
Let's get that orbit scanned and head home....
In 625 to the fifth, auto-relays set...My hands are shaking so bad....
Film...yes, the damned cameras were clicking away from up here...
Did you fellows get anything?
Had no film left by the time. . . (garbled) . . . three shots of the saucers, or whatever they were. . .may have fogged the film.
Mission Control, this is Mission Control...are you under way, repeat, are you under way? What's this uproar about UFOs? Over.
They're set up down there...they're on the moon... watching us....
The mirrors, the mirrors . . . you set them up, didn't you?
Yes, the mirrors are all in place. But whatever built those spacecraft will probably come over and pull 'em all out by the roots tomorrow.... Over and out.
«¡Oh, Dios, nadie lo va a creer!»Pues bien, todo indica que se trata de una burda invención, empezando por la escasa verosimilitud que desprende el texto entero, que parece sacado de una película de ciencia-ficción de serie B. Pero hay más: "Mission Control" era un término que nunca usaban ni los astronautas ni los técnicos en tierra para referirse al centro de control de la misión; decían siempre "Houston" (la ciudad donde se encontraba), que era mucho más corto y fácil de pronunciar. (Por ejemplo, recuerde el famoso "Houston, tenemos un problema" del Apollo 13.) La jerga técnica que parecen estar usando ("field distortion", "orbit scanned", "625 to the fifth", "auto-relays", etc.) es completamente disparatada. No sólo no existe referencia alguna a estos términos en ninguna fuente de información sobre el proyecto Apollo, sino que sencillamente ha sido inventada para simular una conversación entre astronautas. Los astronautas tampoco decían "Repeat, repeat" para que Houston les repitiera alguna frase que no habían entendido; usaban siempre la expresión "Say Again" ("Di otra vez"), que también es más cómoda de pronunciar. [2] La expresión "we're here, all three of us" ("estamos aquí los tres") no tiene sentido, ya que sólo había dos astronautas en la superficie durante cada misión, el tercero se encontraba en órbita lunar. Además de esto, no era tan fácil que el módulo lunar abandonara la Luna como el "diálogo" intenta hacernos creer. Se necesitaban varias horas de preparación y, adicionalmente, el módulo de comando (en órbita alrededor de la Luna) debía pasar por encima del lugar de alunizaje en el momento del despegue. Por último, en algunas ocasiones aparece mencionado el nombre de Christopher Craft como la persona del centro espacial de Houston que habló con los astronautas durante el supuesto avistamiento, pero también en esto hay una equivocación: se trataría de Christopher C. Kraft, director de operaciones de vuelo involucrado tanto en las misiones Mercury, Gémini y Apollo. Pero, en realidad, los directores de vuelo no hablaban nunca directamente con los astronautas durante el vuelo. Esta tarea era realizada por el Capcom (Capsule Communicator), una única persona que se iba turnando a las pocas horas. Normalmente eran los astronautas de futuras misiones los que realizaban este trabajo de Capcom, para irse familiarizando con las tareas que ellos realizarían más adelante.
- Houston: ¿Qué es, diablos, qué es? ¡Es lo único que quiero saber!
- Apolo 11: Estas pequeñas cosas son gigantescas, son enormes... No, no, lo de ahora era una desfiguración óptica del terreno. ¡Oh, Dios, nadie lo va a creer!
- H: ¿Qué... qué... qué diablos está ocurriendo allí? ¿Qué os pasa, chicos?
- A. 11: Están allí, bajo la superficie.
- H.: ¿Qué hay allí? [Interferencias, ruido] Control llamando a Apolo 11.
- A.11: Roger, estamos aquí los tres, pero vimos unos visitantes. Estuvieron aquí un rato, observando los instrumentos.
- H.: Orden de control: ¡Repetid el último informe!
- A. 11: Digo que había otras astronaves. Están alineadas en el otro borde del cráter.
- H.: ¡Repetid, repetid!
- A. 11: Dejadnos sondear esta órbita y a casa... En 625 al 5... Relé automático conectado... Mis manos tiemblan tan fuerte que no puedo hacer nada. ¿Filmar? Cielos, sí, esas malditas cámaras han filmado.
- H.: ¿Habéis captado algo?
-A. 11: No tenía ninguna película a mano [ruidos], tres disparos de los platillos o de lo que fuera pueden haber estropeado la película.
- H.: Control de mando, aquí, control de mando. ¿Estáis ya en camino? ¿Qué hay con ese jaleo de los ovnis? Cambio.
- A. 11: Han aterrizado ahí. Están en la Luna y nos observan.
- H.: Los espejos, los espejos. ¿Los habéis colocado?
- A. 11: Sí los espejos están en su sitio. Pero quien haya fabricado semejantes astronaves puede seguramente venir y quitarlos mañana mismo del suelo. Cambio y fuera.
Por otro lado, es ridículo pensar que la NASA ocultó alguna retransmisión desde la Luna. Los radioaficionados con antenas parabólicas de al menos tres metros de diámetro podían escuchar en directo (y sin ningún tipo de censura de la NASA, ya que eran emitidas directamente por la nave) las conversaciones de los astronautas, apuntando su antena de forma exacta al lugar del cielo en el que se encontraba la nave espacial. Como ejemplo, se puede leer el relato del radioaficionado Sven Grahn sobre su seguimiento del Apollo 17 mediante este método, en 1972. Los diálogos completos de las misiones Apollo y los vídeos de los paseos lunares están disponibles gratuitamente en la página del Apollo Lunar Surface Journal (ALSJ), así como muchos más recursos e información (incluyendo la extensa colección de imágenes tomadas en la Luna desde el Apollo 11 hasta el Apollo 17.) Otto Binder, al que el rumor se refiere como "empleado de la NASA", era en realidad un escritor de ciencia-ficción y cómics (puede leer su biografía en la Wikipedia y una lista de sus novelas), conocido principalmente por ser el autor de la mayor parte de las aventuras del superhéroe capitán Marvel. Binder era aficionado al tema de los ovnis, y ayudó a difundir, a principios de los años setenta, el anterior diálogo falso. Para su regocijo, añadió su nombre entre los "implicados". A pesar de las graves incoherencias del "diálogo lunar", que permiten afirmar sin lugar a dudas su falsedad, la historia sigue siendo divulgada una y otra vez, incluso con añadidos aún más espectaculares, como el siguiente: "La única corroboración de esta historia se obtuvo de Maurice Chatelain, experto en comunicaciones de la NASA. En una entrevista efectuada en 1979, Chatelain confirmó que un retardo de tiempo en la transmisión del diálogo entre el centro de control y el Apollo 11 permitió a la NASA censurar la información referente a los visitantes." De nuevo, falsedades. Chatelain nunca ha sido "experto en comunicaciones de la NASA", sino que fue durante varios años un empleado de la compañía RCA, una empresa del sector espacial que fue contratista de la NASA. Chatelain es otro entusiasta del tema de los ovnis, que escribió el libro Our Ancestors Came From Outer Space (Doubleday, 1978).
La ficción tomada por realidad
Existen otras versiones de estos presuntos avistamientos que, aunque menos extendidas, no tienen mayor credibilidad, porque presentan incoherencias mayores. Analizaremos la única grabación de audio de este tipo, atribuida de nuevo al Apollo 11. Ésta es su transcripción, en inglés y español:
De nuevo, otro diálogo de serie B. Pero eso no es lo peor: la voz ni siquiera se parece a la de Armstrong y Aldrin, como se puede comprobar escuchando sus verdaderas voces, en la colección de vídeos del Apollo 11, en el ALSJ. Hay otro fallo flagrante: el pitido que se oye (llamado Quindar) debería acotar sólo los comentarios del Capcom. Sin embargo, en la 'grabación ovni' se utiliza arbitrariamente al menos en una ocasión. Además, en las misiones genuinas la frecuencia del tono de entrada difería del tono de salida en 50 Hercios (el de entrada era ligeramente más agudo) y duraba exactamente 250 milisegundos, mientras que en esta grabación no hay diferencia entre ellos (se usa el mismo tono de entrada y de salida) y dura aproximadamente 280 milisegundos, excepto el primero, que dura unos 235 ms. (Es fácil comprobarlo con un programa editor de audio. Yo he utilizado GoldWave.)
Un tiempo después de analizar la grabación, tuve conocimiento de que el escéptico Kentaro Mori había investigado y descubierto su procedencia, a raíz de su emisión en la televisión brasileña. Como explica en su artículo, 'Houston, tenemos un fraude', el audio proviene de un pseudo-documental de los años setenta, llamado "Alternativa 3", destinado a ser emitido el Día de los inocentes:
Cuando vi el pseudo documental, descubrí que (...) el audio original puede ser oído un minuto después del inicio de la segunda parte del programa. Que el audio sea original de la broma de "Alternativa 3" explica todo el contenido de la conversación. El astronauta en la Luna, que no es ni Neil Armstrong ni Buzz Aldrin, sino un personaje ficticio llamado "Bob Grodin", no está viendo discos voladores en el satélite natural, sino colonias humanas ya instaladas, parte de la conspiración de Alternativa 3. Es por ese motivo que Houston no da mayor importancia a su sorpresa e informa que "ya sabemos de eso".(...) Los créditos finales de la parodia "Alternativa 3", por si había dudas sobre la autenticidad del programa, enumeran a los personajes y actores que desempeñaron los papeles. En ella estaba nuestro astronauta, "Bob Grodin", interpretado por el actor Shane Rimmer. Una rápida búsqueda reveló de inmediato su página personal y el descubrimiento de que Rimmer es un actor con décadas de profesión que debe ser familiar para todos los amantes de la ciencia ficción. Su estreno como actor, en 1963, fue como el "copiloto Ace" en el clásico de Stanley Kubrick "Doctor Fantástico" [el título de la película en España es "¿Teléfono rojo? Volamos hacia Moscú"]. (...) Rimmer también fue la voz de "Scott Tracy" en la serie animada "Thunderbirds", de los años 60. Entonces lo contacté para confirmar si él era de verdad la voz del astronauta "Bob Grodin" en el audio que dice cosas "súper fantásticas" en la Luna. Él gentilmente respondió: "Sí, aquí está la confirmación de que era yo, Shane Rimmer, como la voz de Bob Grodin en 'Alternativa 3'. Fue divulgado como parte de la promoción de la exhibición acá en el Reino Unido, que estaba grabado de un enlace secreto de una comunicación entre el Apolo 11 y el control de la misión". Y es así que una broma del 1 de abril [el Día de los inocentes en el mundo anglosajón] que, a diferencia de su parodia, no incluía discos voladores, acabó siendo promovida en la ufología como real. [3]Efectivamente, seguirá siendo utilizada por los creyentes de los ovnis para convencer a su audiencia de que en la Luna hay extraterrestres. En España, la han emitido en televisión Javier Sierra e Íker Jiménez, en sus respectivos programas paranormales, por supuesto sin aclarar su origen, dejando así la duda en el espectador. Algo similar ocurrió hace ya unos años con el libro "Bases de ovnis en la Tierra" cuyo autor, Javier Esteban, explicó posteriormente en una publicación escéptica que se trataba de una novela con mucha más ficción que realidad. Un ufólogo tan fiable como J. J. Benítez acabó publicando como reales estos casos inventados en periódicos, revistas esotéricas y libros, incluyendo su risible "Enciclopedia de ovnis"
Para terminar con esta parte dedicada a dudosas transcripciones, un último apunte: los mismos disparatados libros, y páginas de Internet, que dan crédito al "diálogo" de Otto Binder y al audio anterior, muestran extractos de conversaciones (algunas de ellas, de nuevo, inventadas o editadas) en las que aparentemente no ocurre nada extraño. ¿Qué relación tienen entonces con los ovnis? Muy fácil: "los astronautas -afirman- están hablando en código". Una estupenda manera de evitar lo más importante: la falta de pruebas de sus afirmaciones. Este tipo de paranoia abunda entre los ufólogos más desquiciados y sus seguidores.
Fotografías... ¿misteriosas?
Los defensores de la existencia de extraterrestres también muestran diversas fotografías como evidencia de una supuesta actividad alienígena y de ruinas lunares. En este artículo analizaremos las más importantes. Una de las más divulgadas es la borrosa imagen del cráter Ukert que se muestra abajo, obtenida de un atlas lunar. En concreto, Richard Hoagland, el vendedor de desacreditadas historias como la "Cara" de Marte y de otras "ruinas" marcianas, fue el promotor de la imagen de este cráter. De ella comentan: "se observa un triángulo equilátero perfecto de 16 millas". Algunos van más allá y afirman: "Si se unen los tres puntos que se encuentran fuera del cráter, forman otro triángulo equilátero perfecto."
No deja de resultar curioso que habiendo sido cartografiada casi la totalidad de la Luna con un mayor detalle, la mayoría de los defensores de la existencia de actividad alienígena en la Luna muestren tan sólo la anterior imagen de este cráter como apoyo a sus teorías. Por supuesto, con una mayor resolución, los "triángulos equiláteros perfectos" alegados como prueba se desvanecen completamente. Como podemos observar en la siguiente fotografía, el cráter Ukert tiene más bien una forma ovalada que, de todas formas, es notable. La causa de este peculiar aspecto la podemos encontrar en otra fotografía, esta vez obtenida por la sonda estadounidense Lunar Orbiter 3 en 1967, en la que se puede observar que la pared del cráter Ukert se ha derrumbado en dos lugares diferentes del borde del mismo, modificando así ligeramente su forma circular [4]:
Otras hipotéticas anomalías no tienen que ver con ningún elemento geológico de la superficie lunar. Es el caso de supuestos domos, o "cúpulas", fotografiados por sondas norteamericanas y soviéticas en los años sesenta. Las dos fotografías mostradas a continuación, junto a otras similares, suelen venir acompañadas de afirmaciones como "esta es la imagen del Domo de Cristal (sic), en la región lunar llamada Sinus Medii" o "la estructura tiene 18 kilómetros de altura", sin que en ningún momento se nos explique cómo han averiguado el material del que está hecha la cúpula o de qué manera se han calculado esas impresionantes alturas (que, por otra parte, permitirían a los astrónomos aficionados haber localizado estos extraordinarios hallazgos). Las aseveraciones absurdas no acaban ahí, porque también se pueden leer cosas como "esta fotografía y otras similares, causaron que el programa soviético se abandonara tres años después." La imagen a la que se refieren fue obtenida por la sonda soviética Zond 3 en 1965, de lo que se deduce que aluden al abandono del programa soviético para llevar una tripulación a la Luna en torno a 1969 (porque, de hecho, la Unión Soviética siguió enviando sondas no tripuladas hasta 1976). Las causas del abandono soviético son variadas (aunque desde luego nada tienen que ver con los ridículos argumentos ufológicos), y están tratadas con detalle en, por ejemplo, Why did the Soviet Union lose the Moon Race? de la Enciclopedia Astronáutica. Pero veamos las imágenes:
La explicación de estas fotografías, como suele suceder en estos casos, es mucho más prosaica: tormentas de polvo lunar debidas a cargas electrostáticas [5]. Es frecuente leer afirmaciones como "la NASA guarda silencio respecto a estas extrañas fotografías", "la NASA oculta imágenes" o declaraciones por el estilo. En realidad, ya en la década de 1960 varios científicos estudiaron éstas y otras fotografías enviadas por las sondas Surveyor y llegaron a la conclusión de que el polvo lunar, cargado electrostáticamente, puede ascender y llegar a crear una tenue capa por la que se filtran los rayos del Sol, de forma similar a los rayos del crepúsculo terrestre. Posteriormente, los astronautas de las misiones Apollo 8, 10, 15 y 17 vieron lo mismo mientras estaban en órbita alrededor de la Luna, dibujando ellos mismos el acontecimiento:
Por supuesto, los "domos" a los que se refieren los ufólogos no tienen nada que ver con las formaciones geológicas llamadas domos lunares, cuyo proceso de formación es natural y sobradamente conocido. Otra imagen que capta la atención de los ufólogos, ésta ya perteneciente a las misiones Apollo, es la siguiente (izquierda):
En ella podemos observar un extraño fulgor, que algunos identifican como un platillo volante (que vigilaba a los astronautas, por supuesto). Sin embargo, la fotografía anterior (derecha), as12-49-7318, tomada con sólo unos segundos de diferencia, no sólo no muestra nada en el cielo, sino que tiene un brillo idéntico en el lado opuesto de la fotografía. El misterio deja de serlo cuando repasamos el extenso catálogo de fotografías obtenidas en la superficie de la Luna por los astronautas, y observamos que en algunas de ellas, como vemos en las seis mostradas abajo, el exceso de luz vela parte de la película. Esto ocurre normalmente al principio y al final de cada carrete. Nótese que el brillo y la textura de las fotografías en blanco y negro es idéntico al del supuesto ovni (un ovni etéreo, por otra parte). Algunos autores confunden al astronauta de la fotografía como Neil Armstrong (Apollo 11), cuando en realidad se trata de Pete Conrad, del Apollo 12, poniendo de manifiesto la escasa capacidad de los ufólogos crédulos y los "investigadores de lo paranormal" para contrastar la veracidad de afirmaciones fácilmente comprobables. De hecho, esta "prueba" del ovni, se ha exagerado tanto que incluso, junto a la fotografía anterior, se cita a Neil Armstrong diciendo: "una gran bola de luz me sobrevoló durante un tiempo". Una nueva muestra de la credibilidad que merecen los divulgadores de este tipo de historias.
Otra de las "pruebas" más difundidas por los defensores de la existencia de ruinas lunares es la cúpula que, afirman, se puede ver en la siguiente imagen. A la izquierda podemos observar a Alan Bean durante uno de los paseos lunares del Apollo 12, con el módulo lunar a su espalda. En ella se observa un reflejo pentagonal producido por las lentes de la cámara (aumente el brillo de su monitor si no es capaz de verlo). La segunda imagen ha sido "realzada mediante ordenador" por Richard Hoagland para mostrar la "cúpula con aspecto de cristal que hay detrás del astronauta". Podríamos decir que ha sido sencillamente manipulada, porque la distorsión del cielo y la superficie lunar en la segunda imagen nada tiene que ver con la original. Además, la "cúpula" se encuentra entre la cámara y el astronauta, no detrás de él.
De forma similar a la imagen del visor de Aldrin donde algunos creen ver extrañas estructuras o focos de un estudio (que son en realidad la bandera estadounidense y un experimento instalado en la superficie por los astronautas), en otra fotografía el visor de Pete Conrad parece mostrar un "artefacto", de nuevo según Richard Hoagland:
La imagen de alta resolución (algo que los entusiastas de los extraterrestres lunares parecen desconocer), disponible en el ALSJ, permite aclarar que el "artefacto" es suciedad del propio visor (probablemente polvo lunar, depositado por los guantes del astronauta al subir o bajar el visor dorado o los parasoles blancos laterales, utilizados para minimizar la entrada de luz solar al casco), ya que más abajo también se pueden apreciar manchas similares, y que la "sombra del artefacto" no es más que la sombra producida en el traje por la cámara que está sosteniendo Alan Bean, el astronauta que realiza la fotografía, que aparece reflejado en el visor:
Un elemento de la propia nave, convertido en portentoso objeto extraterrestre
Algunos vídeos grabados por los astronautas durante las misiones Apollo también muestran curiosas "anomalías". La mayor parte de ellas son simplemente fragmentos desprendidos del revestimiento del casco de la nave, que pasan volando junto a la ventana durante unos segundos y acaban alejándose y desapareciendo en el espacio. Algunas veces, al pasar de la sombra de la nave a estar iluminadas por el Sol, aparecen de repente, dando al observador inexperto la sensación de que surgen de la nada. Fueron bautizadas como "moon pigeons" (literalmente, palomas lunares), y la NASA encargó un informe técnico sobre ellas, sin hallar nada relevante. También se han dado casos de avistamientos de meteoros, de etapas del propio cohete y satélites. Sin embargo, no todas las presuntas anomalías de los vídeos pueden explicarse en estos términos. Una de las, a priori, más interesantes fue la obtenida por la tripulación del Apollo 16, que se muestra a continuación. Una versión de mala calidad del vídeo en cuestión (fotograma de la izquierda) circula desde hace años entre los ufólogos como una de las pruebas más sólidas de la existencia de platillos volantes lunares. En 2003, el ingeniero japonés Hiroshi Nakamura publicó en una revista que, a pesar de llamarse Journal of Scientific Exploration, se dedica a "anomalías y temas que se apartan de la corriente principal de la ciencia", un artículo en el que, refiriéndose al "ovni" del Apollo 16, decía: "Creemos que el objeto es un gran objeto extraterrestre. (...) Ésta es la única hipótesis consistente con los datos". [6] El error de Nakamura, y del resto de ufólogos convencidos del origen extraterrestre del supuesto ovni, es haber utilizado como fuente de investigación un vídeo de tan baja calidad, que muestra incluso una palpable degradación en el color, y cuyo origen no está en la NASA sino en las sucesivas copias y compresiones a las que ha sido sometido. En el fotograma reproducido a la derecha, digitalizado a partir del vídeo original, es posible observar (aumente el brillo o el contraste de su monitor para verlo con mayor claridad) un elemento horizontal ligado al ovni, que es clave para desentrañar el misterio. Obsérvese también que en el vídeo original aparece el borde de la ventana desde la que se grabó el vídeo (arriba a la izquierda, y a la derecha).
La traza horizontal no es otra cosa que el mástil del EVA floodlight, un dispositivo con un foco en el extremo, situado en el exterior del casco del módulo de comando, que servía para iluminar el exterior de la nave durante los eventuales paseos espaciales (EVA es el acrónimo de ExtraVehicular Activity), y servir de guía durante el acoplamiento de la nave con el módulo lunar. Como se puede ver en la siguiente comparación, la identificación es perfecta [7]. Basta con que el mástil se encuentre en la sombra proyectada por la nave, y el foco esté encendido o iluminado indirectamente por la Luna, para que el mástil pase casi inadvertido y la luz emitida o reflejada por el foco sea captada por la cámara. Esta conclusión es además coherente con el comportamiento del "ovni" en el vídeo, ya que éste no tiene en ningún momento movimiento propio respecto a la Luna o la nave (aquí puede ver el vídeo completo). En la imagen de la derecha puede ver un diagrama del aparato:
Afortunadamente, Nakamura reconoció su error en la misma revista, al ser advertido del esclarecimiento del caso. El mástil del foco exterior del módulo de comando ha sido confundido más de una vez con un ovni. La siguiente es una fotografía de "un ovni con forma de cigarro captado por los astronautas del Apollo 13", según los autoproclamados "expertos en ufología" que publicitan una y otra vez estas historias de los ovnis lunares:
De nuevo, una visita a la imagen de alta resolución, muestra inequívocamente que se trata del EVA floodlight, cuya punta está iluminada por el Sol mientras el resto del mástil está en sombra (nótense los dos bultos del mástil cercanos al foco, nombrados "dual protruding elements" en la comparación previa):
Poniendo de nuevo en evidencia a los ufólogos más crédulos y su capacidad de investigación, la siguiente es otra imagen que muestra el mástil del EVA floodlight, y que es confundida por algunos de ellos con un "ovni cilíndrico". Algunos llegan incluso a hablar de "objeto aéreo en forma de puro suspendido sobre la superficie lunar". El objeto que se aprecia abajo a la izquierda es el espectrómetro de masa, que, una vez situado el módulo de comando en órbita, también se extendía mediante otro mástil. (La imagen está tomada desde una de las ventanas del módulo, en órbita lunar):
Un factor que sin duda que ha influido a la hora de convertir objetos mundanos en "ovnis inexplicables" es la distorsión y degradación a la que se someten algunas de las fotografías. Aquí tenemos un claro ejemplo, presentado como "impresionante objeto fotografiado por el Apollo 12":
En realidad se trata simplemente de la tercera etapa del cohete Saturno V, llamada SIV-B, que colocaba a la nave en rumbo hacia la Luna. Casi con toda probabilidad, la imagen superior proviene de la versión de baja resolución de esta fotografía, y ha sido distorsionada tanto como la imagen de la "cúpula" vista anteriormente. La versión de alta resolución resuelve, una vez más, el "misterio": al estar en penumbra, la etapa es difícil de reconocer (lo que, de todas formas, no hubiera impedido que los ufólogos crédulos se molestasen en investigar el caso, en lugar de calificarlo de inexplicable a las primeras de cambio). A la derecha puede ver la etapa SIV-B más iluminada, en otra fotografía:
Sombras intrigantes
Volviendo a las imágenes de la superficie lunar captadas por otras sondas, la siguiente sombra triangular cercana al cráter Aristarchus, captada por la sonda Lunar Orbiter 4, llama la atención por su aparente artificialidad. Alguien ha añadido sobre la imagen unas líneas para denotar una supuesta relación geométrica entre la sombra y el cráter:
La imagen anterior, sin embargo, es una copia de mala calidad del original. Si observamos una versión de mayor resolución de la misma imagen, comprobaremos que se trata más bien de una mancha, que ocupa una pequeña porción de la fotografía, que es mucho mayor que el fragmento mostrado aquí:
La imagen se sometió a debate en el foro de la conocida página Bad Astronomy, donde se desmontan temas como la astrología o las teorías de la existencia de ruinas en Marte. Preguntaron a Stephen Tellier, un bibliotecario del Instituto Lunar y Planetario, que contestó: "Tenemos en nuestra colección las láminas a tamaño completo (aproximadamente 16 x 20 pulgadas) de las fotografías de los Lunar Orbiter. Saqué la lámina LO4-157-H3 y la examiné con una lupa de 8 aumentos. Hay dos manchas con forma triangular en la tercio inferior de la lámina que, a mi ojo desentrenado, no parecen formar parte de la imagen sino estar sobre ella. Como probablemente sabes, el film del Lunar Orbiter era revelado a bordo de la propia nave presionando una tira de film, cubierta de productos químicos, contra el negativo expuesto, para revelar la imagen. Las dos partes de la película eran entonces separadas para permitir que la imagen revelada fuera escaneada y transmitida a la Tierra. De vez en cuando algo del producto químico quedaba pegado al film revelado y era escaneado, resultando en ese tipo de artefactos." [9]
Buzz Aldrin y el ovni
Para terminar, veremos un caso reciente de mal periodismo. A finales de 2005, muchas bitácoras y medios de Internet se hicieron eco de un documental del Discovery Science Channel en el que el astronauta Buzz Aldrin afirmaba haber visto un objeto no identificado durante el vuelo a la Luna del Apollo 11. Según el documental, se descartó que fuera la etapa del cohete que los envió a la Luna, porque para entonces estaba a unas 6000 millas de distancia, por lo que sólo podía ser... un ovni [10]. La noticia era chocante, porque lo cierto es que Aldrin ha negado, siempre que ha podido, todas estas historias de ovnis (véase, como ejemplo, la entrevista a Aldrin publicada en el boletín nº 33 de 'La Alternativa Racional', en la que se le pregunta específicamente sobre ello, o esta otra entrevista). El asunto alcanzó tal magnitud que incluso llegaron preguntas al respecto al servicio Ask an Astrobiologist (Pregunta a un astrobiólogo) de la NASA, donde el científico David Morrison dio la siguiente respuesta:
Acabo de hablar con Buzz Aldrin por teléfono, y señala que sus palabras están sacadas de contexto y no transmiten el significado deseado. Después de que la tripulación del Apollo 11 verificó que el objeto que estaban viendo no era la etapa SIV-B, que estaba a una distancia de unas 6000 millas en ese momento, concluyeron que probablemente estaban viendo uno de los paneles de separación entre la nave y la etapa superior. Estos paneles no eran rastreados desde la Tierra y estaban probablemente mucho más cercanos a la nave Apollo. Prefirieron no discutir esto en el canal abierto de comunicaciones, ya que eran conscientes que sus comentarios podrían ser malinterpretados (como ocurre ahora). Aparentemente toda esta discusión sobre los paneles fue eliminada del documental, dando así la impresión de que vieron un ovni. [11]Más recientemente, en julio de 2007, Aldrin volvió a negar el rumor en el conocido programa
"Larry King Live" de la cadena CNN. En la página web de la misma se puede leer la transcripción de la entrevista [12]. Los paneles tenían forma curva (como se aprecia en esta representación o en este esquema), lo que encaja con la descripción del objeto que hacen los astronautas: girando a la deriva y cambiando de forma cilíndrica a forma de L. No está de más recordar las palabras de Carl Sagan en su imprescindible libro "El mundo y sus demonios":
"Empezando con el evocador informe de John Glenn sobre las «luciérnagas» alrededor de la cápsula espacial, cada vez que un astronauta decía ver algo que no se entendía inmediatamente, había quien deducía que eran «extraterrestres». Las explicaciones prosaicas -partículas de pintura de la nave que se soltaban en el entorno del espacio, por ejemplo- se rechazaban despectivamente. El señuelo de lo maravilloso embota nuestras facultades críticas. (Como si un hombre convertido en luna no fuera maravilla suficiente.)"Conclusión
Como hemos visto, no hay ninguna evidencia sólida que nos induzca a pensar que, durante los viajes lunares, los astronautas del programa Apollo avistaran extraterrestres o encontraran estructuras artificiales. Lo mismo se deduce, además, de los vídeos y fotografías de los paseos lunares, de acceso público, y de las numerosas entrevistas a los astronautas realizadas desde entonces. Siguiendo la máxima de David Hume, "afirmaciones extraordinarias requieren evidencias extraordinarias", la evidencia presentada por los creyentes deja mucho que desear. Y sin embargo, es posible que esta hipótesis de los encuentros con ovnis en la Luna gane popularidad con el tiempo entre los teóricos de la conspiración, pues tiene la ventaja de evitar las contradicciones más absurdas de la teoría del montaje, a la vez que permite deslizar la idea de que la mayoría de las fotografías y vídeos grabados en la Luna por los astronautas es real, y que tan sólo un reducido número de ellas (las que presuntamente mostraban ovnis o ruinas lunares) ha sido retocado. Recientemente, como muestra de esta tendencia, J. J. Benítez intentó hacer creer con una animación digital, en su ridícula serie 'Planeta encantado' (emitida en la televisión pública española), que Armstrong y Aldrin, los primeros astronautas que pisaron la Luna, encontraron unas ruinas lunares extraterrestres. A pesar de que el fraude de Benítez era evidente [14] [15], muchas personas lo creyeron, como quedó de manifiesto en foros de Internet durante las semanas posteriores. Está claro que el mito extraterrestre nunca va a desaparecer.
Para saber más:
- Astronaut "UFO" Sightings otro artículo de James Oberg publicado en el Skeptical Inquirer, la revista del CSICOP (el Comité para la Investigación Científica de las Afirmaciones Paranormales).
- Richard Hoagland's Nonsense amplia desacreditación de las teorías de Richard Hoagland.
- A Lunar Smokestack? artículo sobre otra prueba esgrimida por los entusiastas de las ruinas, una "chimenea lunar".
- Lunar Enigma investigación de otro presunto ovni lunar realizada por la Fundación Anomalía, dedicada al estudio serio y científico de los ovnis. Este artículo también está disponible en español.